jueves, 11 de septiembre de 2014

Pasado, Presente, Futuro

Hace ya bastante tiempo que no me pasaba por aquí...
Es bastante complicado escribir en una página en blanco ¿sabéis?
Tenía mucho en lo que pensar...demasiado diría yo...
Llevaba varios días con muchas ganas de escribir otra entrada, pero tenia demasiadas cosas en la cabeza: se acercaba septiembre, empezaba la universidad, comenzaban nuevos proyectos, es otra etapa nueva con muchos sueños por hacer y con una inmensidad de objetivos que cumplir con demasiado poco tiempo. A esto hay que sumarle nuevos momentos y anécdotas que dejamos atrás, otro verano finalizado y mucha gente a la que no volverás a ver. Cualquiera se vuelve loco con tanta cosa en la que pensar, y más si es pasada y futura. Nunca estuvo bien mezclar tiempos.
Me asusta hacerme mayor. Me asusta, y mucho. Se ven las cosas diferentes a medida que pasa el tiempo. Ya no solo lo que te pasa o las cosas nuevas que te esperan por hacer. La gente también evoluciona (prefiero llamarlo así, porque mi teoría es que la gente no cambia, evoluciona, porque siempre ha sido así, y no se puede cambiar, solo evolucionar).
Bueno, pues sí, adiós verano y hola septiembre, que ya era hora de saludar.
Con veinte años es complicado coger las riendas de tu vida por la cantidad de inquietudes que se tienen y el deseo de que todas salgan bien, y si no tienes inquietudes preocúpate, hay algo que no estas haciendo bien. 
Supongo que vivir un futuro que no esta presente aún, no es sano. Tampoco lo es vivir en el pasado y lamentarse de todo lo que hiciste mal. Es mejor arrepentirse de las cosas que se quedaron sin hacer. Pero oye, todavía estas a tiempo, "It´s not too late to apologize"

 Las despedidas son de las cosas más dolorosas que hay, y más si son para siempre. Hasta la persona más fría se conmueve por dentro en una despedida aunque no se note por fuera. 
Conocerás a millones de de personas en tu vida. Con algunas congeniaras y llegaras a tener una amistad, otras serán pasajeras, otras te harán daño, con otras sentirás "algo más que amistad"...
y todas ellas tendrán algo en común: dejarán un recuerdo en ti, y por suerte o por desgracia muchas de ellas una marca imborrable.
Tener la oportunidad de relacionarse es de las cosas más maravillosas del ser humano.
Hablaré en primera persona, porque con esto no puedo hacerlo de otra manera y seguro que muchos de los que me leíais os sentiréis identificados, y si no es así, deseo con todas mis fuerzas que alguna vez en vuestra vida lo experimentéis.
Comunicarse en otro idioma, si no lo dominas (vanidades a parte) no es cómodo, y relacionarse...bueno, puede ser hasta gracioso. Pero cuando lo experimentas, en otro país que no es el tuyo, con gente de todas las partes del mundo...es una sensación muy fuerte. Cambias opiniones, preguntas cosas que crees que sabias sobre otras culturas (por lo que has leído en tu país de origen) y a lo mejor no estabas tan cerca de la realidad de lo que creías con las respuestas que recibes, y viceversa.
De verdad que es un subidón de adrenalina y de endorfinas.Te sientes feliz, fuerte, valiente y mil sensaciones más en un campo que creías desconocido, que pensabas que no dominabas, pero ...SORPRESA !!!! te entienden y te entiendes! Haces amistades con pensamientos tan variopintos que solo hacen  que quieras saber más, que te causan curiosidad y lo mejor de todo es que no te juzgan sin conocerte.
Ese ha sido mi verano, una entrada y salida de gente, que emocionalmente, pues pasa un poco de factura. Personas que te han dado más que muchas que ya conocías de antes, y que posiblemente no vuelvas a ver nunca, duele.
"Por eso piensa en mi con las ventanas bajadas, justo cuando el verano empieza a desaparecer lentamente. Eso es lo que yo quiero ser para ti, el verano eterno que existió donde nadie más pudo verlo" y así fue, solo nosotros somos testigos de lo que plenamente nos pasa día a día, de las emociones que sentimos, de los momentos que vivimos..
Por eso, al conocer mundo de boca de tantas personas, al experimentarlo por ti mismo, llego a una conclusión a veces bastante recomendable para uno mismo. Y es que las relaciones muchas veces son como un cristal, que corta, que hace daño, y si esto pasa ¿Que ganas de pasarlo mal? a veces es mejor dejarlas rotas que herirte intentando recomponerlas una y otra vez. Porque quien quiera estar contigo, ten claro que te lo hará saber, por muy lejos que este, aunque se pongan océanos de por medio. La distancia separa cuerpos, pero no corazones. Y esto es algo que he aprendido este verano, y que es una verdad demasiado cierta.
Te puedes sentir traicionado en muchos momentos de tu vida por gente que nunca creías que podía hacerte daño, así que prepara tu mente para estos palos. Nadie dijo que la vida fuera fácil, ni que te tirarían rosas por cada paso que dieras. Coge tu dirección y sigue. Escala los baches, y comete la luna, esa tan enorme e imposible de alcanzar.
                                  Que el maquillaje no apague tu risa,
                                   que el equipaje no lastre tus alas,
                                  que el calendario no venga con prisas
                                  que el diccionario detenga las balas.

                                   Que las personas corrijan la aurora,
                                   que gane el quiero la guerra del puedo
                                   que los que esperan no cuenten las horas
                                   que los que matan se mueran de miedo.

                                   Que el fin del mundo te pille bailando,
                                    que el escenario te tiña de canas,
                                    que nunca sepas ni cómo, ni cuándo,
                                   ni ciento volando, ni ayer ni mañana.

                                  Que el corazón no se pase de moda,
                                  que los otoños te doren la piel,
                                  que cada noche sea noche de bodas,
                                  que no se ponga la luna de miel.
                               
                                   Que no se ocupe de ti el desamparo,
                                   que cada cena sea tu última cena,
                                   que ser valiente no salga tan caro,
                                   que ser cobarde no valga la pena.

Sabina escribió para todos las razones de las razones. Escribe tú sobre ellas, copialas, hazlas tuyas y no dejes que te compren por menos de nada, ni que te vendan amor sin espinas, que mucho menos te duerman con cuentos de hadas y por supuesto que no te cierren el bar de la esquina.
"Porque las personas que están lo suficientemente locas como para pensar que pueden cambiar el mundo, son quienes lo cambian"

         Con color en un pasado, en un presente y en un futuro



                                                                  S.